Archive for the ‘Concursos’ Category

La escaramuza de los coros

enero 29, 2009

Algunas apuestas televisivas llevan en su seno el germen del fracaso, la anticipación de su fallida recepción por el público, dada su errada concepción y su bizarra idiosincrasia. Eso es lo que ha sucedido con el –last but not least– último intento de reality de importación emitido por Cuatro, La batalla de los coros, concluido apresuradamente y retirado de la parrilla tras la celebración de una anticipada final, cuando cabe dudar de que el público, dada su escasa audiencia, supiera siquiera de su existencia.

batalla-de-los-coros_1

Híbrido de talent show, reality y concurso, la fórmula se basaba en la competencia entre coros musicales formados por aspirantes a artistas/cantantes/músicos reclutados en las calles de varias ciudades españolas, capitaneados y jaleados por cinco celebrities dispuestas a ofrecer su capital simbólico (fama y popularidad) en apoyo de sus patrocinados (dos ex-triunfitos como Manu Tenorio y Soraya; tres músicos de muy diversa índole: Marta Sánchez, Lolita y Mikel Erentxun).
Además de que su andamiaje conceptual basado en un tipo de música de ascendencia anglosajona y escasa raigambre y tradición en nuestro país (el godspel o la música coral soul, instrumentalizadas bizarramente aquí como soporte para el más sobado pop rock, en busca de la fácil recepción popular), hacía pensar en un sonado naufragio, tal y como su escaso predicamento entre el público se encargó de confirmar  tras escasas emisiones, el confusionismo vocinglero y la indefinición han sido las constantes rémoras que le han conducido a un seguro descalabro.

Ante un público resabiado y versado en los mecanismos de la telerrealidad en boga, La batalla de los coros ni facilitaba la conexión/identificación con ninguno de sus personajes/concursantes ni se tomó el tiempo previo necesario para la familiarización del público potencial con sus criaturas (esos castings previos que anteceden a la emisión de todo reality con voluntad de éxito como Fama, OT o Factor X), orillando las individualidades en beneficio de unas identidades grupales indiferenciables, dentro de un confuso y altisonante guirigay que intentaba conducir sin éxito un desorientado Josep Lobató, que suma un nuevo fracaso que le acerca al liderazgo dentro del ranking de gafes catódicos patrios.

Así que, en lugar de grandiosa batalla, la propuesta se quedo en efímera y fallida escaramuza.

Pasa el escote

diciembre 17, 2008

El concurso Pasapalabra se ha convertido ya en un lugar común, en un territorio acogedor de las tardes catódicas. De parecida manera a otros concursos consolidados en la parrilla (La ruleta de la suerte, Saber y ganar, Cifras y letras…), ofrece una digna y discreta ración de entretenimiento, barnizado con gotas de asimilable cultura general y riqueza léxica.
Aunque permanece en el recuerdo la labor conductora de la sinpar Silvia Jato, ahora esa tarea recae en Christian Gálvez, valor en alza de la cadena, capaz de conducir la nave con soltura, frescura y facundia juvenil.

marisa_jara_9

Sin embargo, lo que de un tiempo a esta parte me viene llamando la atención es el papel de los rostros populares que acompañan y escoltan a los dos concursantes de cada día. Actores y actrices, modelos, deportistas o cantantes, en ocasiones el tema suele emplearse como plataforma de (re)lanzamiento de viejas glorias o rostros olvidados en el panorama mediático, aunque normalmente suele tener que ver con otros proyectos de la cadena (series, películas, programas, etc…), empleando dicha colaboración como velada operación propagandística (sinergias de grupo mediático, ya se sabe). Aunque, más de una vez, la (discreta) exigencia de las pruebas del concurso han puesto a la luz las vergüenzas de los invitados, sus lagunas culturales y de formación, resultando un trago amargo para quien quiera ver algo más allá de su glamour y su esplendor (me estoy acordando de alguna memorable comparecencia como las de Carolina Cerezuela o Marisa Jara, entre otras). Y es que ésa es otra, recluidas (en el caso de las féminas) a los reducidos márgenes de busto parlante por las exigencias de la planificación y mecánica del producto, premisa escasamente proclive a la exhibición de su belleza en principio, se empeñan en adornar y rellenar (nunca mejor dicho) el programa con neumáticos y estratosféricos escotes (¿acaso la sección de Los melones no va por la misma senda?), para deleite y embobamiento del público masculino e imposibilidad de seguimiento de los derroteros propios del concurso, para el resto. Pues eso, además de las palabras, pasan los escotes, ante la atenta mirada del piropeador Gálvez (cómo no se corte, acabará pareciéndose demasiado a Carlos ‘Guapíiiiissssima’ Lozano).

ferrer_5

Efrén, el tronista fetén

noviembre 30, 2008

efren

Mujeres y hombres y viceversa comenzó medio de tapadillo en la franja de sobremesa de Tele 5, intentando cubrir el vacío del finado tomate sin demasiado éxito. No parecía mucho más que una copia puesta al día de anteriores programas aconcursados de emparejamientos, una traslación escasamente novedosa de modelos similares de la televisión beslusconiana, hibridado con elementos convivenciales propios de un reality, aunque en off (los datos acerca de la convivencia entre los concursantes se comentaban en plató o se filtraban, pero sucedían fuera de campo: en la vida cotidiana de los mismos durante la ‘concentración’ paralela a la grabación del show), centrado en la mistificación de las cuitas del llamado tronista (hombre o mujer), llamado a elegir su favorit@ entre varios ejemplares del sexo contrario, tras una prolongada y variopinta serie de citas románticas.
Pese a que era presentado como original y espontáneo, la componenda mercadotécnica y el predominio de la imagen se adivinaba entre bambalinas y a golpe de share, no en vano, los protagonistas del show, esos jovenzuelos y jovenzuelas a la busca de la media naranja metrosexual, calificados aquí con el atorrante calificativo de tronistas (ya fuean varones o hembras), están extraído de un sopesado y estudiadísimo casting en esas agencias repletas de novatos que ansían convertirse en estrellas de la tele o, cuando menos, en rostros famosos durante los manoseados diez minutos warholianos, aunque sea convertiéndose en carne para mostrar, en cuerpos para la subasta televisiva.

efren_2

Sin embargo, para sorpresa de muchos y pese a varios ajustes de horario, el programa se ha ido consolidándose en la parrilla, mejorando paulatinamente sus cuotas de audiencia, conducido por una Emma García que parece encantada de caminar por el lado más friki de la calle catódica (compagina este programa con el infame humillation show de El juego de tu vida), acompañada en plató por el habitual griterío corifeo de unos espectadores en vivo sabiamente conducidos y por unos llamados sabios de la temática romanticona y el lance seductor, especialistas en donjuanismo de garrafón (encarnados por la eterna aspirante Raquel Navamuel y el karaoke man venido a menos y actor de tercera Paco Morales).
Dicha trayectoria ascendiente ha eclosionado con la participación en el programa, y especialmente con la elección final de partenaire (la morena Soraya, de quien las malas lenguas dicen que ya era pareja del mozo antes de entrar en el programa), de un tal Efrén, un tronista guaperas (pero muy sentido y honesto, ays) que ha desatado la libido del populacho al otro lado de la pantalla (mayormente femenino, imagino) y que, estirando su participación en el show hasta lo (casi) imposible y componiendo un personaje de chulazo de buen corazón, indeciso ante la elección a la que debe enfrentarse y afectado y dolorido tras cada descarte a que se ve abocado, ha llevado a este engendro a las conversaciones de café y, lo que es peor (me temo), a convertirse en un triundo del signore Vasile, consolidándose en la oferta y dandu lugar (esperemos que no demasiado) a propuestas clónicas que pretenderán seguir su tóxica estela.

efren_3